ENVEJECER. Clara Bredy
En vísperas de mis 70 años cumplidos, sigo atenta a los regalos de vida que recibo cada día y los que están por venir. Como cada amanecer, cuando al despertar veo mi cara sonriente, en el pequeño espejo que me mira desde la mesilla. Envejecer es una experiencia llena de sorpresas. Y no me refiero al miedo a lo que nos espera...ni a las limitaciones que conlleva en cuanto a salud y economía. De esas estamos avisadas, y como beneficiarias del Estado del Bienestar, los problemas de salud atendidos por el sistema público, a pesar de estar herido por la privatización, aún supone un importante nivel de protección. Esto acompañado de la pensión pública, de momento protegida, permite una cierta tranquilidad, a pesar de la ofensiva galopante de las derechas, cuyo objetivo es lucrarse con lo que tocan, a través de la privatización. Las sorpresas inesperadas, vienen cuando descubres que, a la vez que vas experimentando tu vulnerabilidad, cada vez necesitas menos para vivir y ad...